LA LOGICA IMPLACABLE DEL TRIUNFO DE CFK
Tomamos un artículo publicado por Carlos R. Roberts de La Nación. Pronosticar el triunfo de Cristina Kirchner era la cosa más fácil del mundo. Tan fácil, que hasta los encuestadores acertaron. Todos los caminos conducían a su victoria, y esa falta de sorpresa se reflejó en la noche del domingo, sin duda la más apagada que siguió a una elección de presidente desde que se recuperó la democracia, en 1983. Si tan fácil era prever su arrasadora conquista en las urnas, no se entiende bien por qué algunos pícaros se empeñaron en hacer desaparecer boletas de la oposición. Se entiende bien, en cambio, por qué ganó ella. Cristina ganó porque los argentinos no tienen una gran memoria histórica, pero les sobra memoria económica. Y Cristina es la continuidad de un gobierno al que los números, después de la catástrofe de hace sólo seis años, le dan bien. Muy bien. Cristina ganó porque los cuatro hijos de Olga, una empleada doméstica, hace unos años eran desocupados y hoy los cuatro tienen trabajo.