Binner! los chicos estan sin leche!
"Antes de que las autoridades socialistas municipales y provinciales comiencen a echarle la culpa a la Nación, a cualquier jurisdicción supranacional o incluso a alguna instancia extraterrena, coordinadores de centros de salud de Rosario denunciaron al diario La Capital que existen dispensarios a los que hace cuatro meses no llega leche “fortificada para evitar la desnutrición se destina a niños menores de dos años, madres que amamantan y embarazadas”. Si alguna vez el músico Fito Páez habló de “la ciudad de los niños sin karma”, los gobernantes de Rosario y Santa Fe parecieran empeñados en que exista un municipio de niños sin leche. Esta denuncia tiene como trasfondo una interna hasta ahora soterrada, entre la “línea” política del gobierno de Hermes Binner y el titular del Ministerio de Desarrollo Social provincial, Pablo Farías, a quien quieren sacar de esa cartera. Según el matutino rosarino, “autoridades provinciales prometen que a mediados de mes podrían estar llegando las cajas de leche”. Tal vez con ellas arriben también los buenos tiempos.
Como si la noticia no revelara una gravedad lo suficientemente inusual, la “orden de no hablar con la prensa” que recibieron muchos coordinadores de los centros de salud recibieron, que Redacción Rosario pudo constatar fácilmente, ofrece una de las aristas más indignantes. “Hay punteros del socialismo que nos hablan de los nuevos centros de salud que se van a inaugurar, pero cuando les decimos que nosotros lo que necesitamos es leche e insumos nos mandan a hablar con «la gente de (Pablo) Farías», y nosotros sabemos que ésa es una interna del gobierno provincial”, relató un coordinador que trabaja hace años en un centro de salud de la zona oeste.
La infame “interna”, de la que no sólo hablan los coordinadores de los centros de salud, parece ser la forma en que la administración de Hermes Binner quiere deshacerse del ministro de Desarrollo Social, Pablo Farías, que fue nombrado como parte del pago de favores a Marcelo Brignoni, líder del sello denominado Encuentro por la Democracia y la Equidad, aunque ahora esa sociedad está trunca.
El “Trompa”, como se lo conoce en el mundillo político, es lo que también en esos ámbitos se denomina un “eX Men”, porque el hombre reporta como ex peronista, ex frepasista, ex aliancista colaborador de Graciela Fernández Meijide, y la lista podría seguir si, como parece, ahora se encuentra a las puertas de convertirse en un ex frenteprogresista, merced a hechos que se suscitaron mucho antes de que comience la “operación leche escasa”, montada por “la gente de Bonfatti”, según voceros cercanos al Ministerio de Salud que quieren mantener su empleo y por ello no dan sus nombres.
Brignoni se autoproclama “kirchnerista”, y estableció una alianza a nivel nacional con el intendente de Morón, Martín Sabatella. Durante el último gobierno de Carlos Reutemann, y fundamentalmente a lo largo del segundo mandato de Jorge Obeid, fue la “cabeza de turco” (valga la ironía respecto del ex jefe de la Juventud Peronista regional II) que el binnerismo usó para no tener que pagar costos políticos demasiado altos frente a una sociedad reactiva a los escándalos. El pago llegó cuando Binner ganó la Gobernación y empezó a armar su gabinete. Un hombre de confianza de Brignoni, Pablo Farías, fue el elegido para hacerse cargo de la ayuda social a través del flamante Ministerio de Desarrollo Social, que vino a reemplazar a la vieja estructura de Promoción Comunitaria.
De bajo perfil, Farías siempre dependió de la buena voluntad de “la línea” política del binnerismo, encabezada por el ministro de Gobierno y No Reforma de la Constitución, Antonio Bonfatti. Cuando Brignoni se distanció de la estrategia pro patronal agropecuaria que Binner eligió para sortear los reclamos de la Mesa de Enlace, comenzaron los problemas. Hoy el pedido de la cabeza de Farías recorre el espinel de la nomenclatura provincial.
La primera intentona por sacárselo de encima se percibió este lunes en medio del cierre de listas de concejales en la ciudad capital. El binnerismo intentó imponerle a Farías como cabeza de esa nómina al intendente Mario Barletta y éste lo rechazó de plano. Dicen quienes estuvieron muy cerca de esa negociación que el propio Binner intentó personalmente imponer a Farías, no por cariño sino para sacarlo del Ministerio y que Barletta tuvo que decirle que el primero de la lista lo elegía él. La salida elegante dio paso, entonces, a la operación “leche escasa”. Las víctimas inmediatas no son ni Brignoni ni Farías, sino los chicos sin leche.
Lo inexplicable asume formato de discurso oficial
Según La Capital, “quedan pocos centros de salud municipales y provinciales con paquetes de leche para chicos de hasta dos años, desnutridos, madres embarazadas y aquellas que están amamantado”, y no se sabe cuándo llegarán las partidas. “En algunos hace dos semanas que no ven una caja de leche. Y en otros, hasta cuatro meses”, se puede leer en la nota, en coincidencia con los chispazos más visibles que saltaron entre Farías y la administración Binner.
En ese sentido, uno de los cortocircuitos más visibles se viene produciendo entre Farías y la ministra de Educación, Elida Rasino, quien desde hace meses se queja ante el propio Binner de la “pobre gestión” del ex colaborador del “Trompa”.
“El coordinador de Salud provincial del nodo Rosario, Lelio Mangiaterra, afirmó que «hay leche en todos los centros de salud», aunque reconoció que la semana pasada se recibió «un 30% menos de lo habitual que se está repartiendo en forma proporcionada». Sin embargo, los que trabajan en los barrios no pudieron afirmar lo mismo”, dice el artículo del matutino local.
Mangiaterra, siempre según La Capital, aseguró que “alrededor del 15 de este mes llegará el resto y que en mayo se normalizaría la situación”, pero no explicó el por qué de la demora ni las razones de tamaña falta de previsión, que suena tan caprichosa como la mención de mayo como el mes de la solución, aunque la proximidad de los comicios del 28 de junio tal vez explique lo que el funcionario no puede aclarar. Algo que también le ocurre a la directora provincial de Promoción y Prevención de la Salud, Andrea Uboldi, quien según el diario rosarino “reconoció que «hay inconvenientes en la entrega» (de la leche) y dijo que «podría hacerse una compra provincial paliativa para Santa Fe y Rosario»”, pero sin explicar por qué esa compra no se hizo antes. Ya vendrán, seguramente, a lo largo de la mañana y la tarde de este martes, no sólo las justificaciones sino los intentos de desviar los misiles hacia la cartera de Farías. Tarde, como tarde se acordó el ministro de quiénes son sus aliados y quiénes sus adversarios."
La infame “interna”, de la que no sólo hablan los coordinadores de los centros de salud, parece ser la forma en que la administración de Hermes Binner quiere deshacerse del ministro de Desarrollo Social, Pablo Farías, que fue nombrado como parte del pago de favores a Marcelo Brignoni, líder del sello denominado Encuentro por la Democracia y la Equidad, aunque ahora esa sociedad está trunca.
El “Trompa”, como se lo conoce en el mundillo político, es lo que también en esos ámbitos se denomina un “eX Men”, porque el hombre reporta como ex peronista, ex frepasista, ex aliancista colaborador de Graciela Fernández Meijide, y la lista podría seguir si, como parece, ahora se encuentra a las puertas de convertirse en un ex frenteprogresista, merced a hechos que se suscitaron mucho antes de que comience la “operación leche escasa”, montada por “la gente de Bonfatti”, según voceros cercanos al Ministerio de Salud que quieren mantener su empleo y por ello no dan sus nombres.
Brignoni se autoproclama “kirchnerista”, y estableció una alianza a nivel nacional con el intendente de Morón, Martín Sabatella. Durante el último gobierno de Carlos Reutemann, y fundamentalmente a lo largo del segundo mandato de Jorge Obeid, fue la “cabeza de turco” (valga la ironía respecto del ex jefe de la Juventud Peronista regional II) que el binnerismo usó para no tener que pagar costos políticos demasiado altos frente a una sociedad reactiva a los escándalos. El pago llegó cuando Binner ganó la Gobernación y empezó a armar su gabinete. Un hombre de confianza de Brignoni, Pablo Farías, fue el elegido para hacerse cargo de la ayuda social a través del flamante Ministerio de Desarrollo Social, que vino a reemplazar a la vieja estructura de Promoción Comunitaria.
De bajo perfil, Farías siempre dependió de la buena voluntad de “la línea” política del binnerismo, encabezada por el ministro de Gobierno y No Reforma de la Constitución, Antonio Bonfatti. Cuando Brignoni se distanció de la estrategia pro patronal agropecuaria que Binner eligió para sortear los reclamos de la Mesa de Enlace, comenzaron los problemas. Hoy el pedido de la cabeza de Farías recorre el espinel de la nomenclatura provincial.
La primera intentona por sacárselo de encima se percibió este lunes en medio del cierre de listas de concejales en la ciudad capital. El binnerismo intentó imponerle a Farías como cabeza de esa nómina al intendente Mario Barletta y éste lo rechazó de plano. Dicen quienes estuvieron muy cerca de esa negociación que el propio Binner intentó personalmente imponer a Farías, no por cariño sino para sacarlo del Ministerio y que Barletta tuvo que decirle que el primero de la lista lo elegía él. La salida elegante dio paso, entonces, a la operación “leche escasa”. Las víctimas inmediatas no son ni Brignoni ni Farías, sino los chicos sin leche.
Lo inexplicable asume formato de discurso oficial
Según La Capital, “quedan pocos centros de salud municipales y provinciales con paquetes de leche para chicos de hasta dos años, desnutridos, madres embarazadas y aquellas que están amamantado”, y no se sabe cuándo llegarán las partidas. “En algunos hace dos semanas que no ven una caja de leche. Y en otros, hasta cuatro meses”, se puede leer en la nota, en coincidencia con los chispazos más visibles que saltaron entre Farías y la administración Binner.
En ese sentido, uno de los cortocircuitos más visibles se viene produciendo entre Farías y la ministra de Educación, Elida Rasino, quien desde hace meses se queja ante el propio Binner de la “pobre gestión” del ex colaborador del “Trompa”.
“El coordinador de Salud provincial del nodo Rosario, Lelio Mangiaterra, afirmó que «hay leche en todos los centros de salud», aunque reconoció que la semana pasada se recibió «un 30% menos de lo habitual que se está repartiendo en forma proporcionada». Sin embargo, los que trabajan en los barrios no pudieron afirmar lo mismo”, dice el artículo del matutino local.
Mangiaterra, siempre según La Capital, aseguró que “alrededor del 15 de este mes llegará el resto y que en mayo se normalizaría la situación”, pero no explicó el por qué de la demora ni las razones de tamaña falta de previsión, que suena tan caprichosa como la mención de mayo como el mes de la solución, aunque la proximidad de los comicios del 28 de junio tal vez explique lo que el funcionario no puede aclarar. Algo que también le ocurre a la directora provincial de Promoción y Prevención de la Salud, Andrea Uboldi, quien según el diario rosarino “reconoció que «hay inconvenientes en la entrega» (de la leche) y dijo que «podría hacerse una compra provincial paliativa para Santa Fe y Rosario»”, pero sin explicar por qué esa compra no se hizo antes. Ya vendrán, seguramente, a lo largo de la mañana y la tarde de este martes, no sólo las justificaciones sino los intentos de desviar los misiles hacia la cartera de Farías. Tarde, como tarde se acordó el ministro de quiénes son sus aliados y quiénes sus adversarios."
Horacio Caró
Redacción Rosario
Redacción Rosario
Nos vemos
Comentarios
Lamentablemente, estos vedettismos los paga el pueblo.
Un Abrazo, Filomata.