2011, SE LARGÓ NOMÁS LA CARRERA..!!!
Después de las declaraciones de Carlos Reutemann con las que se autoproclamó candidato presidencial para el 2011, las elecciones parlamentarias de la primavera que viene cobran mayor relevancia, no sólo porque van en juego las chances del ex-piloto de formula uno, sino las aspiraciones no declaradas de Hermes Binner de cara a las próximas presidenciales. En las primeras horas de 2009 podría decirse sin caer en temeridades que por primera vez en la historia constitucional, Santa Fe tiene dos candidatos expectantes para ocupar el sillón de Rivadavia. Superados los comicios parlamentarios de este año sólo uno quedará en pie, y habrá que esperar que pasen los fastos del bicentenario para conocer el final de esta historia. Es mucho el tiempo que debe transcurrir, sobre todo para un país como la Argentina en donde los acontecimientos verdaderamente se precipitan y "se llevan puestos" proyectos, sueños y protagonistas. En cualquier caso, a la hora en que se escriben estas líneas -y se leen- Santa Fe está en el centro de la escena política.
"Ahora Binner no tiene alternativa: Va a tener que `jugar' aún no siendo candidato porque si pierde la elección del 2009 se queda sin 2011", sostienen algunos dirigentes del socialismo que hasta las declaraciones del Lole pensaban que el gobernador haría "la plancha" en los próximos comicios. Hasta ahora Binner no ha dicho nada de la autoproclamación de Reutemann, y sí en cambio salieron a cruzarlo Rubén Giustiniani -que competirá formalmente por la senaduría- y Miguel Lifschitz que también esbozó prematuramente sus planes para 2011. En definitiva, le están "avisando" a Binner que el peronismo viene por él, y que no hay solamente una estrategia.
Reutemann presidente
"El Lole hace esto para reunir a la tropa y medir lealtades", según la visión de un dirigente peronista de la vieja y lamentable "cooperativa".
"Es la manera de ponerse firme para negociar que Agustín Rossi no esté en la lista", dice un reutemista de la primera hora. "Esto lo ha hablado con Kirchner y es para meterle presión a Binner", es la versión de un soldado K. Las tres versiones y ninguna pueden ser las acertadas, lo que sí es seguro es que para que Reutemann piense en el 2011 tendrá que ganar los comicios en los que va a renovar su banca en el Senado de la Nación.
Lo que cabe preguntarse es hasta qué punto Kirchner va a consentir las exigencias del Lole (como que Rossi no esté en las listas, que se "provincialice" la elección, no ir como FPV y fondos para proselitismo) si a partir del eventual triunfo del PJ en Santa Fe crecerá la figura de otro presidenciable. Es difícil suponer que Kirchner no tomó nota de la reacción de Eduardo Duhalde -por citar al enemigo íntimo- y otros dirigentes del peronismo que se esperanzaron con el anuncio del santafesino.
"Kirchner quiere ganar Santa Fe y le va a dar todo a Reutemann, después se verá qué pasa para el 2011", sostienen cerca del senador, aunque lo más difícil de ese "todo" es que baje a Rossi que ha sido un leal y eficiente jefe de bloque parlamentario. "Con eso sólo ya el triunfo no sería de Reutemann" dicen cerca del "Chivo" esperanzados con que no ocurra lo mismo que lo que pasó para evitar las internas el año pasado.
Falta para los comicios, pero Binner y Reutemann serán sin dudas los principales protagonistas. Paradójicamente, el que gobierna la provincia va a intentar "nacionalizar" la campaña, el otro que aspira a una banca en la Nación va a intentar "provincilizarla". Binner, que no será candidato, va a tener que redoblar esfuerzos entre la gestión y la defensa del triunfo del 2007. Reutemann seguirá jugando al juego que mejor juega y que más le gusta: Ser sin ser. Como alguna vez fue menemista sin serlo, duhaldista en idénticas condiciones, y ahora Kirchnerista también sin serlo. "No le ha ido mal" retruca uno de sus seguidores que todavía recuerda la nota de tapa de Página/12 del primer diario de 2002 -firmada por este cronista- cuando el Lole rechazó la posibilidad de ser Presidente con una frase que ahora retumba: "El destino toca a tu puerta sólo una vez". Y "esa vez" Reutemann no atendió el llamado.
Comentarios